La miopía es una enfermedad ocular caracterizada por tener un ojo más largo de lo normal. La miopía no consiste en mala visión: el desenfoque o mala visión característica de la miopía es solo la consecuencia de este crecimiento anómalo. Por eso, un ojo miope cuya visión se corrige, ya sea con gafas o cirugía, continúa siendo un ojo miope. La miopía no se cura, solo podemos frenar su crecimiento una vez diagnosticada.
Consecuencias de la miopía infantil
Muchos padres desconocen que si no se controla la miopía infantil, el excesivo aumento de la longitud del ojo (por encima de las 6 dioptrías) puede causar con el tiempo (aunque corrijamos la visión con gafas, lentillas o cirugía) serios problemas como desprendimiento de retina, glaucoma o cataratas. Pero, sobre todo, los padres desconocen que es posible frenar su crecimiento.
Además, está demostrado que los problemas visuales en los niños afectan a su rendimiento escolar y, en muchos casos, ni los padres ni los propios profesores perciben a tiempo estos trastornos. Dolor de cabeza, guiños constantes, enrojecimiento ocular y o falta de atención son síntomas frecuentes de este problema.
¿Qué pueden hacer los padres? El control de la miopía
Los nuevos hábitos de nuestros hijos hacen que un 47% de niños vayan a desarrollar miopía, y solo es posible frenarla entre los 7-17 años, en el periodo en que más aumenta. Por eso, si a tu hijo se le ha detectado miopía, es muy importante hagas todo lo posible para frenar su crecimiento. Y si no lo es, es importante que controles su salud visual al menos una vez al año para detectar a tiempo cualquier problema, especialmente si hay antecedentes familiares. Si necesitas evaluar la salud visual de tus hijos pide un examen gratuito.
¿Cómo frenar la miopía de tu hijo?
La opción no farmacológica más segura y eficaz para el control de la miopía, son las lentillas Orto K, que tienen dos grandes beneficios en los niños a partir de los 6 años de edad:
- Corrección de la miopía, hipermetropía y astigmatismo, liberándoles de gafas o lentillas durante su actividad diaria. Las lentillas Orto K se usan durante el sueño. Al dormir, la capa más externa del ojo, el epitelio corneal, se adapta suavemente a la forma de la lente. Al despertar y retirar las lentillas, se puede disfrutar de una visión totalmente normal durante todo el día.
- Ralentización del crecimiento de la miopía en torno a un 43%. Esta función preventiva es fundamental para evitar que la miopía del niño aumente excesivamente o derive en una miopía magna.
¿Pueden usar los niños lentillas?
Aunque no existe hábito entre los padres de poner lentillas a sus hijos antes de la adolescencia, la creencia de que no pueden usarse antes es infundada: supervisado por profesionales y respetando las normas de higiene necesarias durante su uso, la lentillas Orto K son un método de corrección perfectamente seguro que además del control de la miopía ofrece ventajas determinantes frente a otros métodos:
Seguridad
Permite realizar deporte y cualquier actividad física con libertad y seguridad, sin miedo a golpes o roturas, ya que el ojo está libre de correcciones como gafas o lentillas.
Libertad
La libertad, la estética y el no depender de métodos de corrección tiene un efecto muy positivo en la autoestima y la calidad de vida de los niños y adolescentes, permitiéndoles llevar una vida plena y sin limitaciones.
Control parental
Orto K, al usarse al ir a dormir y al despertar, puede ser siempre supervisado por los padres e integrarse fácilmente en la rutina familiar sin riesgo de accidentes cuando no están presentes, como ocurre con las gafas o las lentillas diurnas.
La satisfacción de nuestros pacientes es nuestra mayor garantía
En Avanlens somos especialistas en Orto K. Con un equipo formado por oftalmólogos y optometristas, aplicamos nuestra experiencia de 14 años y más de 3.000 de pacientes para mejorar su salud visual y su calidad de vida.
Nuestra misión: la salud visual y el control de la miopía
Somos miembros de la Academia Europea de Ortoqueratología (Euro-K) y colaboramos con la Asociación de Miopía Magna con Retinopatías (Amires) en la promoción de hábitos saludables y en la concienciación sobre la necesidad de la prevención y el control de la miopía.
Preguntas frecuentes sobre las lentillas nocturnas Orto K
¿Con qué edad puede usar Orto K? ¿Qué graduaciones corrige?
Las lentillas nocturnas Orto K pueden usarse desde los 6 años (con la supervisión de padres o tutores). Pueden corregir la miopía (0,5 a 7 dioptrías), hipermetropía (0,5 a 4 dioptrías), astigmatismo (0,5 a -5 dioptrías) y la presbicia (con técnicas como la monovisión). También es posible utilizar Orto K si se tiene miopía en un ojo e hipermetropía en otro.
Cómo funcionan las lentillas nocturnas Orto K
Las lentillas nocturnas Orto K se usan únicamente para dormir y tienen una curvatura interior especial a medida para cada usuario, con un diseño diferente según se trate de un paciente miope, hipermétrope o astigmático. Al usarse por la noche, la capa más externa del ojo, el epitelio corneal, se adapta suavemente a esa forma de la lente. Este cambio de curvatura es minúsculo y no causa ninguna molestia o sensación diferente a una lentilla convencional, pero es suficiente para que, tras las horas de sueño, el ojo se haya adaptado a esa curvatura, la de un ojo con una visión totalmente normal. Este efecto dura todo el día (entre 20 y 30 horas aproximadamente) y va desapareciendo paulatinamente hasta que el ojo vuelve a su estado original en unos días, aunque se recomienda el uso de las lentes todas las noches.
¿Es seguro Orto K? ¿Puede causar molestias al dormir?
Las posibles contraindicaciones de las lentillas Orto K son semejantes a las de cualquier lentilla convencional. Su uso nocturno no causa ningún tipo de molestia. Los usuarios refieren que durante las primeras 2-3 noches de uso notan la presencia de la lente en el ojo, de forma muy leve y que no interfiere con el sueño. Esta sensación desaparece con los días de uso. Debe tenerse en cuenta que las lentillas Orto K están diseñadas exclusivamente para su uso nocturno (no diurno) así que no presentan ninguno de los problemas de dormir con una lentilla convencional, como que se adhiera al ojo. Además es un tratamiento totalmente reversible: en caso de suspender su uso la córnea vuelve a su estado original sin ningún tipo de secuela. Es necesario tener en cuenta que no existen tratamientos 100% “definitivos”. Incluso tras una cirugía láser, existe la posibilidad de que la miopía vuelva a aumentar.
¿Pueden usar lentillas los niños?
Las lentillas son un método de corrección apropiado para niños a partir de los 6 años. Como con los pacientes adultos es necesario seguir unas condiciones de higiene y correcta manipulación por lo que es necesario que su uso sea supervisado por adultos.